jueves, 19 de agosto de 2010

Volaré



Mari, ay el volaré, mari...

Es una de las últimas cosas que he escuchado decir a una amiga de este bálsamo que bien conocemos. A mis amigas las maris les he regalado unas muestras para que prueben y me digan qué tal les fue. Un poco en plan Cillit Bang esperando los prósperos resultados pero sin obligarles del todo a contar los detalles, sólo con ver sus caras me valió para que en las próximas reuniones siga recomendando este producto. A veces, no vale sólo con que me guste a mí ¿no?

Para los que estén más perdidos poco o mucho podemos decir. Es un gel que se aplica en las zonas íntimas femeninas con un delicado masaje y que aumenta la sensibilidad y produce una excitante sensación de frío-calor.

En cada reunión me dicen cosas diferentes, sensaciones distintas porque cada una nota lo mismo pero no de la misma forma porque, eso sí, todas lo prueban, al principio hay que esperar a que una se lance y después, lo mejor, todas se quedan mirando unas a otras para ver cómo va resultando la prueba. Es una de las partes más divertidas de las reuniones.

Yo recomiendo empezar con una pequeña cantidad porque es suficiente para producir los primeros estímulos y si la dosis fue pequeña, seguir aumentando hasta conseguir la sensación deseada. El gel se absorve rápidamente y es de uso externo.

Ya sabéis, Maris, seguid probando que tengo Volaré para todas...

Escuchando: Volando voy - Camarón

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